“Matán engendró a Jacob “
Por Álvaro de la C.
Señor mío y Dios mío
Rezando este evangelio leo muchos nombres, algunos que me suenan, otros que no y me fijo
en Matán, abuelo de José, pero lo más importante: bisabuelo de Jesús, el Mesías anunciado
por los profetas que traería la Paz a Israel!
Pienso en mi mismo y me veo pequeño, muchas veces insignificante, como muchos de los
hombres de esta genealogía que pensaron que pasarían desapercibidos a la historia. Pero les
recordamos!
Señor me muestras a través de todos estos hombres que tú siempre vences, tú voluntad
infinitamente buena y amorosa se acaba cumpliendo para hacer obras grandes.
Yo me entrego a ti, no se que quieres de mí, no sé qué haré que te pueda ser útil y por eso me
pongo en tus manos. Te pido me ayudes a obrar bien y a seguirte estando vigilante pues sólo
tú sabes cuándo volverás quizás en esta generación quizás en la siguiente quizás en 40
generaciones.
Te pido me enseñes y guíes superando mis faltas y errores igual que estos hombres fallaron;
con la confianza de que tú pronto vendrás.
Gracias, ¡Ven Señor Jesús!
“Y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús”
Por Héctor G.
Señor, el leer hoy Tu genealogía, el ver “Tu foto de familia” me remite directamente a la mía propia: a mis padres, hermanas, abuelos… a tanta gente que ha colaborado, sabiéndolo o no, para que hoy esté aquí, ante Ti. Para que esté aquí con mis capacidades y mis dones, sí, pero también con mis rebeliones internas, con mis sinsentidos, con mis cansancios, con tanta tontería como llevo encima. Porque con todo ello, con todo lo que soy, es con lo que me has llamado.
Y eso me llevaba a fijarme en José, en cómo de un origen aparentemente humilde salió un hombre tan grande y tan entregado a Dios… en su familia. Me lleva a fijarme en la confianza que tuvo en Ti.
Porque mucho dicen (o al menos a mí me lo han dicho) de los seminaristas , sobre el valor que hay que tener para dar un paso así; pero lo de José no fue un paso, sino un gran salto de fe.
Menuda fidelidad, menuda entrega, a Ti y por Ti.
Y pensaba en cómo quiero vivir esta Navidad que se acerca, en cómo viviría José sus primeras Navidades. En cómo aceptó a María en su vida y, en consecuencia, a Ti mismo. En cuánto amor tendría su mirada al ver a su esposa, o al verTe a Ti, al niño Emmanuel, acostado en el pesebre.
Por ello te pido que me recuerdes el ejemplo de José, para que estas Navidades, con la familia que me has regalado y en la que me has permitido crecer, siga confiando en Ti, mirando con amor, sirviendo en silencio, viéndote crecer en cada corazón.
Y así, como decía mi abuelo con esa frase tan suya, poder seguir exclamando: ¡qué contento estoy con mi familia!
Os dejamos las canciones que se han interpretado para que podáis escucharlas:
-Enciende una luz
– Adestes fideles
– Aleluya de Hillsong
– Temblando estaba de frío
– Alabare
– La Virgen sueña caminos
Y para terminar este trimestre os dejamos algunos villancicos para cantarle al Niño Dios que se hace hombre.